sábado, 24 de noviembre de 2007

Sábado, pollos y revoluciones

Otro sábado, día de ave por excelencia. En casa de ave no se come pato los sábados ni ningún animal con alas salvo pollo y si está de oferta. Es posible que no se coma pato alguno nunca, pero es discutible.
Una vez uno de nuestros amigos, los amigos del ave, claro, compraron un pollo con fritas un sábado. Esto no cayó bien a félix, pero cuando se enteraron que era una verdadera ganga porque eran pollos con gripe aviar, compraron otro y lo bendijeron tres veces antes de comerlo. Las papas, por cierto, pueden comerse cualquier día. Nueve días después galleta tuvo nueve pecas en nueve deditos, nuestros peritos (de fe) están todavía tratando de determinar si las pecas fueron a consecuencia de que el pollo estaba maldito.

"Anexo 1. Teorías sobre la cocción del pollo a la parrilla.
En Ave muchas veces discutimos acerca de la forma en la que se debe emplazar al gallináceo en la parrilla al iniciar su asado. Algunos creen que se debe empezar por las costillas, otros por la parte de la piel. Bueno, es una discusión eterna. Punto."

Otra cosilla, hoy sábado estaría audicionando para ingresar a la banda el niño beto. Él escuchó el demo, él dijo, "quiero formar parte de ave, acepto el desafío aunque tenga que remar mucho para que en AF me traten como uno de ellos."

Es obvio que siempre te discriminaremos beto, eres como el bajista que ingresó a Metallica, eres la oveja negra, pagarás el derecho de piso si llegáramos a aceptarte. Cuando toques bien te diremos "qué mal lo hiciste beto, eres una infamia!!!!". Cuando se te ocurra un tema o una buena idea te diremos "es horrible beto, por qué no te dedicas a la metalurgia" y acto seguido robaremos tu tema o tu idea y nos la adjudicaremos como propia. Hablaremos mal de tí a tus espaldas y les diremos mentiras a la gente acerca de tu orientación política; les diremos "sí, él estuvo afiliado al partido por una nueva españa, qué pelotudo!" y reiremos fuerte.

Son todas posibilidades chicos, no se pongan así. Siempre cuestionando nuestros métodos, nos dicen que somos muy rudos, muy exigentes, muy muy. Estamos haciendo algo nuevo, es lógico que nos cuestionen, pero a veces tiene que limitarse a contemplar.
Porque pronto ya no habrá tiempo para nada. Será el tiempo de todo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Puchitas, yo una vez he sido Beto en una banda!!!!
Que feo es ser Beto! Pero bueno, después migré con otro pibe para hacerle coros y como yo supuestamente estaba enamorada de él, el me trataba como su secretaria.
Tal vez por esas dos experiencias abandoné la música y ahora me dedico plenamente a escribir. Y me dedico un... qué boluda, jaja.
Besos para todos!

Anónimo dijo...

jijijij, siempre nos toca ser el beto de algo... pobre betito, en realidad nunca audicionó, vino una vez a escucharnos.

Besos,

fede j. (campagna)